BACALAO GRATINADO

BACALAO GRATINADO

Porciones: 2

INGREDIENTES:

250 g de espinaca baby cuidadosamente lavada
Sal y pimienta
15 g de mantequilla
2 filetes de bacalao sin piel, de 140 g, aprox. 1 cm de espesor
1 cucharada colmada de harina de maíz
150 ml de leche
30 g de queso gruyére o cheddar maduro rallado
3 cucharadas de queso parmesano recién rallado
1 yema de huevo
¼ de cucharada de mostaza de Dijón
Una pizca de páprika o de pimienta cayena

PROCESO:

Precalentar el horno a 220°C. Caliente 2 cucharadas de agua en un cazo grande a fuego alto. Cuando esté bien caliente, añada las espinacas y cubra con una tapa. Cocine de 2 a 3 minutos, revuelva de vez en cuando hasta que las espinacas se hayan encogido. Pase las espinacas por una caldera y escurra la mayor cantidad de agua posible haciendo presión  sobre las espinacas con una cuchara de madera. Salpimienta al gusto.

Engrase ligeramente con mantequilla una bandeja refractaria utilizando la mitad de la mantequilla.  Ponga las espinacas en el fondo del plato. Sazone el bacalao con un poco de sal y pimienta y ponga los filetes sobre las espinacas. Distribuya la mantequilla restante sobre el pescado. Hornee durante 10 minutos hasta que el pescado se haya puesto opaco en forma pareja. (Los filetes más anchos pueden durar más tiempo).

Mientras tanto, mezcle la harina con maíz con 2 cucharaditas de leche hasta lograr una pasta, luego añada la leche restante en un cazo. Lévelo a un hervor a fuego lento y revuelva durante 4 minutos hasta que espese. Mezcle el queso gruyére 1 cucharadita de queso parmesano con la salsa caliente hasta que el queso se derrita. Revuelva con la yema de huevo y la mostaza, luego sazone al gusto con sal, pimienta, paprika o pimienta cayena.

Saque la bandeja del horno. Rocíe la salsa sobre el pescado y las espinacas, luego cúbralo con el parmesano restante. Gratine hasta  que la salsa esté ligeramente dorada y haciendo burbujas.